La misión DART (Prueba de redirección de doble asteroide) fue la primera prueba de la NASA de un sistema de defensa planetaria y, según las observaciones e investigaciones posteriores al impacto, la órbita de la luna asteroide Dimorphos ha sido alterado con éxito.

En 2022, DART chocó intencionalmente con Dimorphos. El objetivo era probar el potencial de un impactador cinético para desviar un asteroide peligroso que pueda suponer un riesgo para la Tierra en el futuro. Si bien las predicciones iniciales fueron en gran medida precisas, las observaciones posteriores al impacto revelaron cambios inesperados en la forma y rotación del asteroide.

Dimorphos, originalmente achatado, se volvió más alargado después de que la nave espacial DART chocó con él. Esencialmente, el asteroide pasó de tener forma de hamburguesa a tener una forma más parecida a la de una pelota de fútbol. Esto contradice suposiciones anteriores sobre la formación de la luna y sugiere un proceso más complejo. El impacto también perturbó el equilibrio entre Dimorphos y su asteroide principal, Didymos, acortando su órbita.

Estos cambios tienen implicaciones para futuros esfuerzos de exploración, incluida la misión Hera de la Agencia Espacial Europea. Es probable que Dimorphos comience a dar vueltas caóticamente en el espacio, volviéndolo potencialmente inestable para futuros aterrizajes.

La misión Hera antes mencionada es una continuación de DART, diseñada para realizar una investigación detallada. Hera se lanzará en octubre de 2024 y se espera que llegue al sistema Didymos a finales de 2026. La atención se centrará en estudiar las propiedades físicas de Dimorphos y Didymos, incluida su estructura interna, composición y características de la superficie.